Cometí el error
de nunca haberte robado un beso
o de esconder mis ojos
de tu mirada exploradora
cometí el error
de no preguntarte el nombre
aunque no me conocieras
de perderte en el metro
y de sólo suspirarte.
La piedra del mármol
es dura, se sabe
pero más duro
es el golpe que dan juntos
el cincel y el martillo
si me arrepiento de algo
es de haber cometido el error
al no querer equivocarme contigo.
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